El  Nanochromis transvestitus , Stewart & Roberts, 1984, Ciclido transvestido  es sin lugar a dudas un dudas un Cíclido enano Africano especial, por su extraordinario colorido y su interesante comportamiento reproductivo.

Procede del Lago Mai Ndombe en la República Democrática del Congo (Antiguo Zaire).  Los parámetros físico-químicos del lago son muy particulares, factor clave para su reproducción. Habita aguas muy ácidas con niveles de pH de 4. Aguas muy blandas ya que en el fondo se acumula gran cantidad de materia vegetal incluidos troncos en descomposición.  Toda esta materia orgánica colorea el agua volviéndola marrón cobrizo. La coloración es tan intensa que limita la visibilidad a más de 30 cm. 

En el caso de las mayorías de especies de Cíclidos del Este de África el macho presenta mayor coloración que la hembra.  Sin embargo en esta especie es la hembra quien luce una coloración mucho más intensa, de hay el nombre común de transvestido.  En la época del cortejo la hembra, quien inicia el cortejo, presenta un llamativo vientre rojo. Intensifica su coloración ventral con tonos entre azulado y violeta. Otro detalle cromático muy atractivo son las llamativas rayas verticales blancas y negras en las aletas dorsal, caudal y anal.

El macho no es tan colorido como la hembra. Su cuerpo es estilizado. Alcanza tallas sobre los 8 cm. La hembra algo más pequeña no superando los 7. Es significativo también la terminación de la aleta dorsal en los machos que finaliza en punta como ocurre por lo general en la mayoría de especies de Cíclidos. La coloración del macho es grisácea con el vientre blanco. De la aleta dorsal bajan unas bandas que se van difuminando hasta mitad del cuerpo de color gris oscuro verdoso.

El  N. transvestitus  modifica la intensidad de la coloración según el estado de ánimo.  En momentos de estrés o cuando están afectados por parásitos internos pierden la coloración pudiendo a parecer casi blancos. 

Mantenimiento del Cíclido transvestido en acuario

Las particularidades físico-químicas del agua de origen deberían ser reproducidas lo más ajustadas posibles para que nuestros Cíclidos nos ofrezcan su mejor coloración.

El sustrato del acuario no debe tener mucha granulometría, máximo 3 mm, porque el transvestitus le gusta horadarlo para construir cuevas y refugios con su potentes mandíbulas. En estas cuevas será, de producirse, donde se realice la puesta.  El color preferiblemente oscuro, negro, marrón o rojizo.

Es recomendable plantar abundantemente el acuario con especies de plantas que se adapten a las particularidades del agua, preferiblemente géneros  Echinodorus  y  Sagitaria . También podemos incluir  Vallisnerias . Las Vallisnerias desarrollaran dos funciones en el acuario, por un lado permitirán delimitar territorios y por otro tamizarán en parte la iluminación ofrecida lo que es beneficioso.

Es imprescindible teñir el agua aplicando algún producto a base de turba que fácilmente podremos encontrar en nuestro comercio.

El filtro no deberá crear turbulencia  , ni tener exceseivo caudal. También deberemos añadir una carba de turba para contribuir a la acidificación del agua.

En el caso del mero mantenimiento de la especie podemos aligerar un poco la exigencia con los parámetros  manteniendo aguas ácidas entorno a 6 de pH, dureza entre 5 y 10 dGh. Temperatura enter 24 y 27ºC. Es importante cuidar la no presencia de compuestos nitrogenados a través de la realización de cambios periódicos de agua.

En el acuario aceptan todo tipo de alimento congelado… larva roja, blanca, artemia, papillas caseras con aportes vegetales. Es mejor ofrecer una pequeña cantidad un par de veces diarias. Aceptan también la comida desecada de calidad por lo que podemos ir variando los alimentos.

La reproducción del  Nanochromis transvestitus

La reproducción es algo delicada y sólo al alcance de aficionados avanzados.  Resulta fundamental reducir el pH al menos a 5 y bajar la dureza hasta 4-6 con una conductividad no superior a 90 microsiemens. De otro modo la puesta es muy probable que no llegue a buen fin por las adversas condiciones osmóticas. 

E l macho de transvestitus genera territorios antes de la fase de cría y se volverá agresivo con los intrusos.  Para evitar estos problemas podemos mantenerlos con peces que naden en la parte media de la columna de agua por lo que no competirán con los pequeños Cíclidos.  Tetras africanos de la familia Alestidae  serán perfectos como compañeros. Podemos incluir neones, otros tetras e incluso peces escalar pero no quedará tan natural el acuario.

Durante la época de cría el macho se vuelve muy territorial y expulsará del territorio incluso a las hembras.

Si potenciamos la alimentación y ajustamos los parámetros a los de origen la hembra comenzará a producir huevos y aumentará su coloración. Entonces se acercará al territorio del macho donde empezará un cortejo nadando en forma de “S”.

Si es aceptada el macho cesará su comportamiento agresivo y la tomará como compañera.  Una vez formada la pareja comenzarán a buscar sitio para la puesta. Tras localizarlo y prepararlo sin cesar los movimientos de cortejo la hembra pondrá en varias pasadas los huevos en el techo de la cueva. A cada pasada de la hembra le sigue el macho que los fertiliza. Los huevos son de color ocre amarillento y el proceso dura unas dos horas.

Tras la puesta, en torno a los 30-40 huevos, la hembra queda en el interior de la cueva cuidando y abanicándola. El macho se mantendrá en el exterior alejando a cualquier intruso. 

Al noveno día ya se podrá ver a la hembra salir del nido acompañada de los alevines que en ese momento ya se encuentran bastante desarrollados.  Es el momento de comenzar a alimentar con  nauplios de artemia  recién eclosionada. La alimentación se repite tres veces al día. Durante este fase la familia permanece unida. Si los progenitores avistan cualquier riesgo avisan a la prole con movimientos que provocan que los alevines se peguen al fondo. 

Tras un periodo aproximado de dos semanas se puede sacar a los progenitores porque la hembra ya estará preparada para otra puesta.

• Enlace relacionado:  Una buena propuesta más sencilla de mantener y críar por sus condiciones menos exigentes sería el  Pelvicachromis pulcher , el cíclido de vientre rojo

Vídeo:  Parade of  Nanochromis transvestitus