Clasificación:

Orden: Cichliformes
Familia: Cichlidae
Género: Apistogramma
Especie: A. macmasteri

La palabra Apistogramma, en griego, significa literalmente "línea lateral irregular", refiriéndose a una característica común de este género. Su apellido, por su parte se lo debe a un aficionado a los cíclidos enanos llamado Mark Macmaster.

Distribución:

Pez de origen sudamericano, endémico de Colombia, donde lo podemos encontrar al pie de la Cordillera de los Andes en los afluentes de la cuenca alta del río Meta (ríos Guaytiquía y Metica).

En su área de distribución, se encuentran en áreas con niveles muy bajos de agua (los juveniles se encontraron en áreas donde el nivel del agua no superaba los dos centímetros); en zonas con gran cantidad de hojas en el fondo y una densa vegetación entre la que se esconden los peces.

Forma:

Cuerpo alargado y comprimido lateralmente típico de los cíclidos enanos, con las aletas dorsales y anales bastante desarrolladas. Los ojos son grandes y la boca, de labios gruesos, está situada en una posición bastante baja respecto a la cabeza.

Los primeros radios de la aleta dorsal aumentan paulatinamente en tamaño (del 1º al 5º), mientras los siguientes son ya todos del mismo tamaño.


Aleta caudal redondeada, y aletas dorsales y anales muy alargadas (en algunos machos llegan incluso a sobrepasar la aleta caudal).

Coloración:

Su coloración es muy llamativa, y por ello es uno de los cíclido enanos más demandados.

Cuerpo de coloración plateada, con presencia de escamas con iridiscencias azules y rojas, sobre todo en la zona inferior del ojo. La parte superior de la cabeza y la cara son de color marrón, con la típica línea transversal de color negro de los Apistogramma que parte de la boca, atraviesa el ojo, y llega hasta la base de la aleta caudal, donde presenta un ocelo negro. Esta línea puede ser más o menos visible, incluso discontinua, formando una especie de sucesión de puntos negros.



Las aletas presentan un color entre rojizo y anaranjado, más acentuado si cabe en la aleta caudal que tiene dos franjas rojas muy marcadas en ambos extremos, superior e inferior, con su parte central amarillenta.

Se han conseguido colores más brillantes en piscifactoría que los que se encuentran en la naturaleza, a base de criar en cautividad de manera selectiva cepas salvajes muy coloridas. Sin embargo, se sospecha que parte de los ejemplares que se venden en el comercio puedan ser consecuencia de hibridación con A. viejita, lo cual da origen a peces estériles. De hecho, hay veces que se venden incluso como A. viejita.

Tamaño:

Alcanzan un tamaño máximo de 5.5cms SL (longitud total del pez sin contar la aleta caudal) en el caso de los machos (unos 7cms en total). Las hembras, algo más pequeñas, suelen rondar los 5cms SL.

Dimorfismo sexual:

Los machos son más grandes y gruesos y notablemente más coloridos que las hembras; y sus aletas están más desarrolladas, sobre todo los extremos de las aletas dorsal y ventral. El color de las hembras es parduzco, que deriva a un amarillo bastante vistoso en época de cría.


Esperanza de vida:

Se les estima una esperanza de vida de entre 3 y 5 años; aunque alguna fuente dice que pueden llegar hasta los 9 años.

Parámetros del agua:

PH: 5.0-7.0 (óptimo 6.0-6.5)
GH: 1-5 (óptimo 2-4)
Temperatura: 23-30ºC

Son sensibles a concentraciones altas tanto de nitritos como de nitratos.

Acuario:

Requieren un acuario de al menos 60cms de longitud y no menos de 80 litros de capacidad, donde podremos alojar un solo macho con dos o más hembras, pero se sentirán más cómodos en acuarios más grandes, con múltiples escondite y espacio para nadar.

Se recomienda una composición muy plantada repleta de troncos, piedras y ramas creando multitud de refugios y zonas de sombra, sobre un fondo de arena o sustrato suave. Con este mismo propósito pueden habilitarse también vasijas, macetas de barro u otros elementos decorativos. Añadir hojarasca seca enfatizaría más la sensación natural, además de promover, con su descomposición, el crecimiento de colonias de bacterias beneficiosas, por cuanto que suponen una valiosa fuente secundaria de alimentos para los alevines y liberan taninos y otras sustancias químicas muy apreciadas por esta especie, creando un ambiente de aguas negras en el que se sentirán más a gusto. Las hojas pueden dejarse en el tanque hasta su completa descomposición o reemplazarse al cabo de unas pocas semanas. También se puede filtrar con turba.

La iluminación ha de ser tenue, con plantas que se adapten bien a estas condiciones de luz como Microsorum, Taxiphyllum, Cryptocoryne o Anubia; e incluso vegetación flotante para tamizar la luz. La filtración, o al menos el flujo de agua, suave también; y es mejor hacer cambios de agua pequeños y regulares (10-15% del volumen total del acuario cada vez), que grandes y espaciados.

Alimentación:

Omnívoro, con preferencia carnívora.

En la naturaleza son micropredadores que se alimentan fundamentalmente de larvas de insecto, alevines de otros peces y otros pequeños invertebrados.

En acuario agradecerá pequeño alimento vivo y congelado como Artemia, Daphnia y larvas de quironómido. Aceptan también el alimento seco, con mayor preferencia, normalmente, por el granulado. Con cierto aporte vegetal como los copos de espirulina o un pedacito de pepino de cuando en cuando, compondremos una dieta variada y equilibrada que dará como origen peces más sanos, vitales y de colores más vivos.

Comportamiento:

Su comportamiento territorial, común a la mayoría de los cíclidos, hace que no sea aconsejable mezclarlos con otros cíclidos en la misma urna. Fuera de la época de cría, se puede mostrar tranquilo e incluso tímido, pero su comportamiento varía de forma radical cuando llega ésta.




Reproducción:

Desovadores de sustrato.

El acuario de cría deberá tener agua blanda y ácida (GH 2º, PH 5.5), y una temperatura máxima de 28ºC.

Las puestas, que suelen oscilar entre 60 y 120 huevos, las realizan normalmente sobre el techo de cuevas o en grietas o cavidades que encuentren entre la decoración, siendo la hembra quien cuida tanto de huevos como de larvas, mientras el macho se ocupa de defender el territorio. Si el acuario no es lo suficientemente grande, será necesario retirar al macho puesto que puede volverse muy agresivo.


A. Macmasteri con su puesta

La eclosión se produce a las 48 horas aproximadamente, y los alevines se alimentan de su saco vitelino durante los primeros 5-7 días. Una vez superado ese plazo, comenzará la natación libre y ya podremos empezar a alimentarlos con nauplios de Artemia.